miércoles, 7 de mayo de 2014

LA CUESTIÓN DE LA TÉCNICA. LA VISIÓN DE MARTIN HEIDEGGER SOBRE LA TECNOLOGÍA



El modo trágico en que terminó la Segunda Guerra Mundial causó una profunda conmoción, no sólo en la opinión pública sino también entre los filósofos. 

Dice Escohotado:

"En los que vivieron aquello, como Heidegger o Sartre, y en los demás existencialistas, lo que informa todo, de un modo u otro, es su condición de conciencias sitiadas entre guerras. Asisten a las conflagraciones más letales de todos los tiempos y ninguno de ellos vivirá lo suficiente para adivinar siquiera el final de la guerra fría. Les toca vivir, a ellos y al resto de su generación, el espectro cotidiano de una hora final para la humanidad, sostenida sobre gigantescos arsenales nucleares ".

En ese contexto, en 1949, dentro de una serie de cuatro conferencias dadas en el Club de Bremen, Heidegger presentó un ensayo sobre la técnica, un tema en el que seguiría trabajando en los años cincuenta y sesenta. 

A pesar de que son textos breves, estos ensayos marcan la tendencia de algunos de los desarrollos más importantes en filosofía de la tecnología. 

Si atendemos a los textos por la importancia de sus efectos, como le gustaba decir a Quintín Racionero, entonces, este sobre la técnica es uno de los más influyentes de Heidegger. 

Martin Heidegger sigue vigente en una parte importante de la filosofía de la tecnología que se hace en Estados Unidos. Filósofos como Paul Durbin, Don Ihde, Larry Hickman y Carl Mitcham siguen esta estela con añadidos extraídos de la fenomenología y el pragmatismo, corrientes filosóficas generales subyacentes en muchos de estos trabajos.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------

La pregunta por la técnica

M. Heidegger

Traducción en castellano de Eustaquio  Barjau: Heidegger, M., conferencias y artículos, 1994

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Dice Heidegger:

La técnica es un modo de hacer salir de lo oculto y pertenece por lo tanto a la región de la verdad. 

La pregunta por la técnica[2] es una pregunta obligada, dice Heidegger, por el hecho de que aun negándola, la técnica esta ahí:

No hay forma de vivir en el mundo y librarse de la técnica. Que la técnica tiene carácter instrumental es básicamente correcto, puesto que es un instrumento para algo, pero también es algo por sí misma”. 

Ese algo, es lo que le interesa a Heidegger, que nos remite en primera instancia a la teoría de la causalidad de Aristóteles, siguiendo la pista de la relación entre lo causal y lo instrumental. 

“Ser causa de algo se puede identificar con ser responsable de algo y ser responsable, cuando tiene que ver con que algo suceda, puede interpretarse como ocasionar, que algo sea el caso. Los cuatro modos de la causalidad son pues cuatro modos de ocasionar, de traer-ahí-delante”. 

Desde este punto de vista, esto es, desde la perspectiva de una causalidad más amplia que la de la causa eficiente, la técnica no es sólo un medio, es también des-ocultamiento.

Ahora bien, la técnica tal como era en la antigua Grecia, no tiene las mismas características que la técnica moderna. Aun permaneciendo el rasgo de hacer salir de lo oculto, la técnica moderna fuerza a la naturaleza. Es la diferencia entre un molino de viento y la extracción de carbón o petróleo para obtener energía.

Mientras que en el primer caso se está a expensas de que sople o no el viento, en el segundo se pone ante la naturaleza la exigencia de suministrar energía. El hacer salir de lo oculto que domina la ciencia moderna tiene pues el carácter de emplazar, en el sentido de provocar: 

“Análogamente a como las montañas se ven coligadas por la sierra, o a como los distintos estados de ánimo se ven coligados por el talante, los distintos elementos de la técnica aparecen coligados por la estructura de emplazamiento”. 

El modo que prevalece en este hacer salir de lo oculto en la técnica moderna, dice Heidegger, es esa estructura de emplazamiento. Ese algo que emplaza al hombre al trabajo técnico y a la vez hace que este trabajo emplace a la naturaleza como almacén de existencias de energía.

La estructura de emplazamiento pone en peligro la relación del hombre consigo mismo y con todo lo que es. Si el hombre se convierte en un simple solicitador de existencias entonces anda al borde de despeñarse, de precipitarse allá donde él mismo va a ser tomado sólo como mera existencia.

La esencia de la técnica es pues ambigua en un alto sentido. Por un lado, parece decir Heidegger, tenemos la técnica cuando ésta es arte que hace salir de lo oculto una escultura de un trozo de mármol, por ejemplo. Por otro lado, tenemos la técnica cuando ésta es instrumento para forzar a la naturaleza, 

Básicamente, dice Heidegger, hay una diferencia entre la tecnología moderna y la antigua, la antigua estaba en armonía con la naturaleza, cooperando con ella como coopera un molino de viento con el viento, la tecnología moderna, por el contrario, fuerza a la naturaleza; como cuando se almacena la energía para utilizarla más tarde. Con lo último se consigue algo de forma no natural, por la fuerza.

Al verlo todo como fuente potencial de energía, el hombre hace perder a la naturaleza su identidad para convertirla en algo preparado para el diseño humano.

En suma, podemos decir que a Heidegger le preocupa la posición de omnipotencia que ocupa la técnica en el mundo moderno. 

La técnica media entre la naturaleza y el sujeto convirtiéndose en la metafísica de la era atómica

De la técnica derivan dos riesgos básicos:

(1) Que la técnica se vuelva sobre el hombre como nuevo objeto explotable,y

(2) Que la reducción de lo real a lo útil vele progresivamente cualquier otro horizonte humano.

Para conjurar estos dos peligros se requiere una transformación real del mundo, que consiste precisamente en renunciar a transformarlo: “hay que dejarlo ser”.

----------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Para profundizar en la filosofía de la tecnología de Heidegger:

TÉCNICA Y SER EN HEIDEGGER HACÍA UNA ONTOLOGÍA DE LA TÉCNICA MODERNA

ANGELA LUZIA MIRANDA

TESIS DE DOCTORADO

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Sobre la forma de expresarse de Heidegger:

Heidegger in Plain English: The Phenomenology in Being and Time 

TORCH, University of Oxford

 Extract from  Sacred Language, Sacred World


-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------




No hay comentarios:

Publicar un comentario

LA ALTERIDAD CONSTITUYENTE ENLAZADA POR EL LOGOS. HERÁCLITO

Una vez que se descarta al Heráclito movilista que nos presenta la realidad como permanentemente cambiante, nos encontramos con otro Herácli...