viernes, 30 de enero de 2015

PENSAMIENTO COMPLEJO, NEOPLATONISMO MÁGICO Y MECÁNICA CUÁNTICA

El pensamiento complejo ( en la versión de Morin) reniega de la tradición racionalista que arranca desde Bacon y Descartes, que sigue con el positivismo en el XIX, y llega con el l neopositivismo al siglo XX.

Busca inspiración en otras corrientes que en su momento quedaron colapsadas. 

Una de esas corrientes es el neoplatonismo mágico, uno de los dos caminos por los que el neoplatonismo entró en el Renacimiento (el otro camino es el místico que venía por la vía de Dionisio Aeropagita).

El neoplatonismo mágico se asienta en la Escuela de Florencia de la mano de Marcilio Ficino.

¿Qués es la magia según la versión neoplatónica de Marsilio Ficino?


La magia es el conocimiento técnico que permite, o que obliga, a los espíritus a desprenderse. 

¿Qué son los espíritus? 

"Son sustancias extraordinariamente sutiles e impalpables, etéreas, que canalizan el influjo de los astros en las cosas terrenas, pero también de las cosas entre sí; podemos atraer los espíritus de los animales, de las plantas, los perfumes y colores..." (B. Orio de Miguel, Esplendor y decadencia del pensamiento organicista hermético- kabbalistico, Del  Renacimiento a la Ilustración, Trotta, 1994, pag.208).


¿Quiénes pueden tener cierto control sobre los espíritus?

El mago-sacerdote y el alquimista, que desempeñan un papel de atractores de espíritus, gracias al conocimiento que poseen del circuito que conecta el mundo divino superior con el alma del mundo y con el mundo sensible.

Cada cosa de este mundo es un trasunto, una chispa, de la divinidad, y el conjunto de todas ellas con su reflejos y la emisión de sus imágenes o espíritus, es el mundo, en el que el hombre o microcosmos es el centro en cuyas manos ha dejado Dios la decisión de descubrirlo. El alma human no está herida ni hecha, sino que se autocrea y decide su posición y relación con la divinidad.

Crisis y colapso del neoplatonismo


Esta herencia intelectual es recogida por los platónicos de Cambridge, y la idea de inmanencia y de acción divina en el mundo es la que les coloca en un posición marginal  en la naciente ola generada por la ciencia de finales del XVII, mecanicista. 

Su concepción es antimecanicista y es vitalista y decae al tenérselas que ver con la epistemología cartesiana que se muestra eficaz para desembarazarse de cualidades ocultas y espíritus incontrolables y empezar a decir algo acerca de la naturaleza. 

¿Qué interés puede tener el neoplatonismo mágico para el pensamiento complejo?

Tiene el interés de lo alternativo, cuando lo que tenemos no acaba de funcionar  con suficiente rendimiento explicativo.

Los físicos cuánticos no tienen mucho reparo en reconocer que no consiguen atrapar intuitivamente la mecánica cuántica. A veces parece que se llega a comprenderla, pero es un impresión efímera que pasa en cuanto se contempla otro aspecto un poco distinto al que se acaba de comprender.

Por eso se necesitan cosmogonías diferentes a la  heredada. El primer paso es recurrir a lo disponible aunque ahora esté en desuso. La idea de inmanencia puede llegar a ser útil para tirar de ella al tratar de entender el complejísimo corazón de la materia.

Lo que el neopositivismo ha querido hacer, durante casi todo el siglo XX, es liberarse de la metáfisica, para quedarse con un ciencia que dependa sólo de la experiencia física objetivable. Lo que el pensamiento complejo propone es que si ese programa ha resultado un camino lleno de obstáculos, qué tal si aceptamos cierta dosis de metafísica de aquella que tuvimos disponible y que en su momento abandonamos quizás apresuradamente.

miércoles, 28 de enero de 2015

LA GEOINGENIERÍA A PARTIR DE 2010: 2025.

Mike Hulme decía en 2010, en un artículo publicado en The Guardian, que durante ese año la forma de enfocar la ciencia y la política del cambio climático había cambiado, rompiéndose la relación directa y lineal entre resultados científicos y acción política. 

Una de las consecuencias que preveía Hulme era la entrada en escena de soluciones que hasta el momento se habían descartado. En concreto veía como probable un aumento del interés en la geoingeniería como solución al cambio climático.

Ciertamente, durante años se ha visto a la geoingeniería como una solución tecnocrática que tenía muchos más inconvenientes que ventajas. Sin embargo,  en 2010, las manifestaciones en favor y en contra se fueron primero igualando, y finalmente aparecieron bastantes textos favorables; a aplicar técnicas de geoingeniería, o al menos a pensar un poco más en serio sobre ello.

La geoingeniería, o dicho con más propiedad la ingeniería climática, no trata de mitigar las emisiones de dióxido de carbono, ni de adaptarse a la nueva temperatura resultante. Trata de reaccionar al incremento de temperatura provocado por los gases de efecto invernadero,  básicamente aumentando la capacidad reflejante de la atmósfera frente a la radiación solar.

Este tipo de soluciones provocan desconfianza y rechazo en sectores destacados de la sociedad, ya sea por una desconfianza general en las soluciones tecnológicas, ya sea por los riesgos ambientales implicados, ya sea porque con esta solución no se pone el acento en la mitigación de las emisiones, o por una combinación de todo ello.

El caso es que en 2010 estábamos en una situación que era el resultado de varias circunstancias. 

Por un lado, no fue posible el acuerdo en Copenhague, cumbre en la que se había puesto a partir de 2007 grandes esperanzas, por otro lado había una mayor certeza de que el cambio climático es real y de que es antrópico, pero que sin embargo la ciencia no puede aquilatar los detalles y que queda bastante margen para tomar decisiones y que por lo tanto queda abierta la negociación entre agentes con intereses divergentes; y que el tiempo juega, no obstante, en contra de dilatar las decisiones porque se puede llegar a puntos de no retorno.

Basta echar una ojeada a la recopilación de artículos que presentaba por ejemplo The Guardian (Climate Change political science) para comprobar que algo estaba cambiando en este tema, y basta ver algunos artículos en  revistas especializadas  para ver que se ha pasado del rechazo casi total en la comunidad científica a la actitud de que que habría que pensar un poco más sobre el asunto.

 ( ARTÍCULO Solar geoengineering to limit the rate of temperature change, Douglas G. MacMartin, Ken Caldeira and David W. Keith).Control and Dynamical Systems, California Institute of Technology, Department of Global Ecology, Carnegie Institution for Science, Stanford, CA 94305, USA, School of Engineering and Applied Sciences and Kennedy School ofGovernment, Harvard University)

En 2025, La geoingeniería es un área de investigación activa, pero todavía no es una opción de mitigación aceptada a gran escala. Su uso genera debates éticos, políticos y técnicos complejos.
 
Se continúa investigando en tecnologías de geoingeniería, principalmente en dos áreas: 

Gestión de la radiación solar (SRM): Busca reflejar la luz solar de vuelta al espacio, por ejemplo, inyectando aerosoles en la estratosfera.

Eliminación del dióxido de carbono (CDR): Se centra en capturar el CO₂ directamente de la atmósfera para almacenarlo de forma segura.  
 

Los principales argumentos en contra de la geoingeniería se centran en los riesgos desconocidos para los ecosistemas, la posibilidad de que se convierta en una "solución fácil" que retrase la acción climática real y el riesgo de que su uso parcial pueda desestabilizar el sistema climático de forma impredecible.

EROS Y CIVILIZACIÓN DE MARCUSE EN MAYO DEL 68. ARQUEOLOGÍA WOKE. LA SOCIEDAD DEL CANSANCIO DE HAN.

Eros y Civilización, de Herbert Marcuse, se había publicado más de diez años antes de mayo del 68. No era un texto reciente y ya estaba asim...